BLOG

1. Cláusulas abusivas en préstamos hipotecarios: cómo identificarlas y reclamar
Durante años, muchos consumidores firmaron hipotecas que incluían condiciones desproporcionadas a favor de las entidades financieras. Entre las más comunes se encuentran las cláusulas suelo, los gastos hipotecarios cargados indebidamente al cliente, intereses de demora excesivos, vencimientos anticipados y hipotecas multidivisa mal explicadas.
La defensa del consumidor consiste en analizar el contrato, presentar una reclamación al banco y, si este no responde o se niega, acudir a los tribunales. En la mayoría de los casos, los afectados pueden recuperar el dinero pagado de más y obtener intereses a su favor.
2. Despido improcedente o disciplinario: diferencias y derechos del trabajador
Cuando una empresa decide extinguir una relación laboral, debe justificar correctamente la causa y respetar todos los requisitos legales. El despido disciplinario se fundamenta en un comportamiento grave del trabajador; si no se demuestra, se declara improcedente. El despido objetivo, en cambio, se basa en motivos organizativos, económicos o productivos y conlleva una indemnización determinada por ley.
Si el despido no cumple las exigencias legales o la empresa no acredita la causa, será considerado improcedente, permitiendo al trabajador optar entre indemnización o readmisión con salarios de tramitación. Es esencial actuar en un plazo de 20 días hábiles para poder reclamar.
3. Herencias y conflictos entre herederos: pasos para una sucesión ordenada
La tramitación de una herencia implica múltiples pasos: contar con un testamento válido, elaborar un inventario de bienes, valorar correctamente el patrimonio, aceptar o renuncia la herencia y gestionar el pago de impuestos dentro del plazo.
Los conflictos surgen habitualmente por diferencias en la valoración de los bienes, repartos considerados injustos, herencias sin testamento o impugnaciones de disposiciones testamentarias. Con asesoramiento jurídico, es posible proteger los derechos de cada heredero, agilizar los trámites y evitar que las tensiones familiares deriven en litigios prolongados.
4. Qué hacer si recibes una sanción administrativa: recursos y plazos clave
Recibir una sanción administrativa exige una respuesta rápida y precisa. El primer paso es revisar la notificación para identificar errores, falta de pruebas o defectos formales. Después, se deben presentar alegaciones en el plazo indicado, aportando argumentos y documentación que desvirtúe los hechos.
Si la administración mantiene la sanción, puede recurrirse mediante recursos administrativos y, llegado el caso, ante los tribunales contencioso-administrativos. Muchas sanciones son anuladas por falta motivación o por incumplimientos procedimentales, por lo que un buen asesoramiento desde el inicio incrementa considerablemente las posibilidades de éxito.
5. Cómo proteger una empresa en situaciones de insolvencia: guía práctica del concurso de acreedores
Cuando una empresa empieza a mostrar señales de dificultad (falta de liquidez, incapacidad para asumir pagos o acumulación de deudas) es fundamental actuar antes de que la situación de agrave. El preconcurso y el concurso de acreedores permiten negociar con proveedores, bancos y otros acreedores, reorganizar la estructura de la empresa, reorganizar la estructura de la empresa y evitar responsabilidades de los administradores.
A través de estas herramientas se pueden alcanzar un convenio para mantener la actividad o, si no es viable, ordenar la liquidación con garantías. na actuación temprana puede marcar la diferencia entre salvar el negocio o perderlo.
6. Delitos más comunes en el ámbito empresarial y cómo prevenir responsabilidades penales
Las empresas pueden enfrentarse a importantes consecuencias legales si se producen delitos dentro de su actividad. Entre los más habituales destacan el fraude, la estafa, la administración desleal, el blanqueo de capitales, los delitos fiscales o la falta de medidas de seguridad para los trabajadores.
Para prevenir estos riesgos, resulta imprescindible contar con un plan de compliance penal, revisar los procedimientos internos, vigilar las áreas más sensibles, formar al personal y establecer canales de denuncia interna. Estas medidas no solo protegen a la empresa, sino que también acreditan diligencia ante posibles investigaciones o responsabilidades penales.
